El problema es que la ejecución es pobre. Aunque la parte frontal es discutible, no es del todo mala. El ensanchado lateral ya me empieza a chirriar un poco, aunque he de decir que las llantas FAB Design Evolution de 20 pulgadas envueltas en neumáticos Dunlop Sportmaxx GT no están del todo mal. Pero el horror llega al contemplar las entradas de aire para el motor y el espantoso doble alerón trasero. Sí, el MP4-12C Spider retiene su spoiler-aerofreno de serie, así que FAB Design pensó, ¿por qué sólo un alerón?
Y es por ello que una gigantesca barra de bar corona la zaga. Desde luego, las gaviotas estarán contentas de tener un sitio tan cómodo donde posarse, si no se asustan del trabajo que se ha realizado sobre el paragolpes. El discreto conjunto de serie da paso a un aglomerado de formas y rejillas, en el que se pierde la esencia de las salidas de escape o las finas ópticas. En cuanto al interior, si nos gusta el color naranja, no se trata de un mal trabajo. No obstante, para mi gusto hay demasiado cuero rugoso en el mismo.
En el plano prestacional y dinámico no tenemos quejas. Un nuevo escape deportivo se instala y se retoca la centralita electrónica en profundidad. La potencia pasa de los 625 CV de serie a unos respetables 680 CV, que mejorarán ligeramente las prestaciones. El sistema de suspensión hidráulica no se retoca y el coche debería retener su dinñamica. No obstante, olvidémonos de la idea de un superdeportivo discreto y elegante, el FAB Design McLaren MP4-12C Spider Terso se encuentra más cómodo en el parking de Fabrik que en las calles de Mónaco.
