SRT prepara más potencia para los Dodge Challenger SRT8 y Charger SRT8

Que el Dodge Challenger SRT8 se había quedado atrás, muy atrás, en la lucha encarnizada que tienen las tres grandes de Detroit por ser el rey en términos de potencia no lo duda nadie. Si nos vamos a las cifras que se pronostican para el Chevrolet Camaro ZL1 y para el Shelby Mustang GT500, la cosa queda aún más clara. Mientras que el primero se espera que llegue con una potencia apoximada de 570 CV, el segundo se espera que supere los 600 CV, caballo arriba, caballo abajo. Con 470 CV, la lucha está más que perdida.

Pero ahora Chrysler LLC tiene un nuevo aliado en esta batalla, la división Street And Racing Technology se ha independizado y tiene más libertad para hacer y deshacer a su antojo. O al antojo de los seguidores de Dodge, puesto que para finales de 2012 lanzarán una nueva versión del Dodge Challenger y del Dodge Charger con una potencia que llegará hasta los 570 CV según modelo. Con esas cifras, ya estamos hablando de cosas serias. Si además someten a una dieta de adelgazamiento al Dodge Challenger SRT8, es posible que en las comparativas no vuelvan a quedar los últimos, pero lo veo difícil.

Para extraer esos 570 CV de potencia del motor HEMI V8 6.4 de los SRT que se montan sobre la plataforma LX (Challenger SRT8 y Charger SRT8) van a recurrir a un compresor volumétrico Eaton y se actualizarán además las transmisiones de ambos modelos, incluyendo en los dos cajas manuales de ocho relaciones. Si todos estos rumores son ciertos, podría ser que Dodge está allanando el camino para la llegada de la próxima generación del Dodge Viper.

Con estos cambios, el Dodge Challenger SRT8 ya podría enfrentarse de tu a tu con sus máximos rivales en el mercado estadounidense. Como decía antes, si le aplican también una reducción de peso (es el más pesado de los tres con diferencia), la cosa se va a igualar notablemente y dejará de ser el patito feo de los tres ponys actuales. Y no porque sea el menos agraciado, sino porque siempre era el que llevaba las de perder.