El diseñador Christian Förg ha creado un concept car que recoge unas cuantas ideas ya vistas en los vehículos futuristas: la inclinación según la velocidad para mejorar la aerodinámica, conducción automática y recarga de las baterías según se avanza por las autopistas. Se llama Speedway Concept Car.
Es un vehículo urbano con un enfoque más práctico que emocional, una herramienta para ir de un lado a otro, aunque sin dejar de lado tampoco la carga estética ni formal. Dispone de dos asientos para dos acompañantes, pudiéndose girar el delantero en función de la inclinación del vehículo para maximizar el uso del espacio interno, o levantarse para que se puede acceder al segundo, ya que se entra por la parte delantera.
Además, dispone de un modo autónomo total en el que el vehículo, una vez haya dejado a sus ocupantes, se iría a un parking de forma automática, ahorrando esas insoportables vueltas en busca de un sitio para aparcar. Con este sistema, ya se podrán prevenir los viajes sin tener en cuenta los 5-45 minutos para buscar sitio para aparcar en la ciudad.