Hoy en día es tan difícil encontrar un deportivo – nuevo – con motor V12, tres pedales y cambio manual como cruzarte con un perro verde. Muy lejos quedan aquellos flamantes superdeportivos de Maranello y Sant’Agata con su delicado cambio manual y los recorridos dibujados en forma de hache. Resulta irónico que hayan sido aquellos que habitualmente consideramos del lado más confortable y dócil del deportivo, Aston Martin, los que hayan conservado hasta la fecha un modelo, el Vantage, con motor de doce cilindros y cambio manual.
El Aston Martin V12 Vantage se convertía por méritos propios en uno de los modelos más pasionales de la marca británica. No solo contaba con un cambio manual, sino que no existía alternativa automática o, en este caso, de cambio manual pilotado que careciera de pedal de embrague al uso. Pero por desgracia para aquellos que hoy en día siguen renegando del cambio manual, que cada vez son menos, al V12 Vantage le llegó su hora para ganarse una S, perder el pedal izquierdo y recibir un cambio secuencial muy parecido al del propio Vantage GT3 de carreras.
El nuevo Aston Martin V12 Vantage S llegará próximamente para sustituir a los actuales V12 Vantage, que hasta ahora podían conseguirse por casi 208.000 euros con carrocería coupé y 232.000 euros en el caso del V12 Vantage Roadster de carrocería descapotable. Quizás hayamos perdido la última oportunidad para comprar un V12 Vantage nuevo, puesto que su sustitución se producirá inmediatamente y aparentemente los pedidos se cerraron hace meses tras superar con creces las mil unidades fabricadas que se habían previsto inicialmente.
Con el Aston Martin V12 Vantage Roadster sucede algo parecido. Inicialmente Aston Martin había previsto fabricar 101 unidades, que en principio ya han sido adjudicadas, pero a día de hoy no conocemos a su sustituto.
Y si nuestro tren ya ha pasado y no podemos hacernos con un V12 Vantage manual nuevo, quizás sea el momento de recurrir a las plataformas de ocasión. Actualmente hay auténticos “kilómetro cero” por algo más de 150.000 euros, un ahorro importante respecto al modelo nuevo. Aún no se ha producido un verdadero efecto de revalorización, que con la llegada de un Vantage más avanzado en todos los sentidos y una producción relativamente extensa, quizás no llegue jamás.
2 de junio de 2013
DFFGFFFGGGGGG