Renault Twizy, a partir de 6.990 euros

Abrimos un paréntesis en la enorme vorágine que está suponiendo el Salón de Ginebra para centrarnos en una noticia muy importante para el futuro de los vehículos eléctricos. Renault ha anunciado los precios que tendrá el Renault Twizy, uno de los primeros eléctricos que pondrán a la venta dentro de su importante estrategia de futuro sobre este tipo de coches.

El precio anunciado es de 6.990 euros, incluidos los impuestos. Además, esta cifra podría rebajarse aún más si los diferentes gobiernos autonómicos o el central aplican subvenciones para la compra de vehículos eléctricos hecho que también podrá ocurrir en el resto de mercados europeos en los que hará presencia. La firma del rombo asegura que este precio es muy cercano al que tienen las scooter de tres ruedas existentes en el mercado.

Personalmente, esta noticia ha supuesto un gran alivio para mí. El plan eléctrico de Renault transmite buenas sensaciones, pero lo que más me preocupaba era el precio que pudieran tener los coches. Aunque el Twizy no sea propiamente un turismo, el precio resulta bastante competitivo para lo que ofrece, siempre y cuando teniendo en cuenta el enorme sobreprecio que un coche eléctrico suele tener frente a su equivalente de combustible fósil.

Además del precio de compra, también ha sido anunciado el coste del alquiler de las baterías, que es la fórmula con la que Renault pretende canalizar este delicado tema. Los usuarios tendrán que pagar 45 euros al mes por el alquiler, siempre y cuando el kilometraje anual no exceda de los 7.500 km. Por tanto, el coste mensual de uso del Twizy será de 45 euros más el gasto eléctrico, una cifra que debería ser notablemente inferior a la de un vehículo equivalente de gasolina o diésel.

Recordemos que Renault tiene previsto que este modelo comience a fabricarse en serie este mismo año, en la planta que tienen en Valladolid. A pesar de ser tan pequeño, puede ser una buena solución no excesivamente cara para aquellos que realicen trayectos cortos. Si funciona comercialmente, el éxito será doble: la planta pucelana se asegurará su futuro y los vehículos eléctricos se adentrarán en la sociedad de forma más masiva.