Impresionante modelo de Duesenberg de 1932 a escala, hecho a mano y con una sorpresa bajo el capó

El Duesenberg de 1932 fue uno de los coches más lujosos y espectaculares de su tiempo y frecuentemente es uno de los coches preferidos de los coleccionistas de modelos a escala, por su gran cantidad de piezas y el detalle que las mismas tienen que tener para que el modelo alcance una cierta calidad.

¿Y si te digo que un modelo a escala puede ser “algo más”? Puede ser un coche a escala, con motor a escala totalmente funcional. Pero antes de que te cuente más acerca del motor, mencionar que este Duesenberg le ha costado a su autor seis años de trabajo, partiendo de piezas que él mismo ha tenido que crear. El detalle es asombroso y, sobre todo, el detalle de cada una de las piezas que componen el mini-motor V8 de 1.936 centímetros cúbicos.

En la foto precedente se pueden ver los pistones, bielas, válvulas, el mismo bloque motor, los resortes… en fin, todo ha demandado un gran trabajo para el creador de esta joya del modelismo que nos muestra el primer arranque del motor, con la ayuda de un taladro eléctrico para arrancar moviendo el cigüeñal y gas propano como combustible.